Anoche finalizó la telenovela Que Pobres Tan Ricos en México por El Canal de las Estrellas. La telenovela vio a todos sus personajes terminar felices y a los villanos castigados con un buen merecido. La parte final de la dos horas de transmisión el personaje de Jaime Camil rompió con la cuarta pared y transmitió un mensaje muy bonito sobre la tolerencia y el respeto entre la humanidad. El final nos recordó a aquel bello final en donde por última ocasión vimos a Evita en Por Ella Soy Eva. Veamos la última parte a continuación:
Aquí les dejamos el texto completo…
La vida es un camino de aprendizajes y regalos que cada quien va encontrando a su paso. Algunas veces las dos cosas llegan juntas, como el amor de tu vida, los hijos que es lo mismo si son sangre de tu sangre, o alma de tu alma. El amor… es un misterio porque cuando es más fuerte que el miedo y la inercia, entonces el amor se vuelve milagroso. Rejuvenece a los mayores y hace madurar a los que le apuestan a dejar de ser niños para cumplir con su responsabilidad de pareja.
¿Saben lo que es lo más importante, lo mejor, lo machín, acá? Cuando el amor derrota al egoismo y los prejuicios. Ahí si es bien chido, me cae. Sobre todo en un mundo en donde todos los días el odio irracional intenta superar a la razón. Y algo muy importante, el derecho a ser distintos merece el mismo respeto para quien piensa igual o para quien piensa diferente a nosotros. Todos somos iguales! No importa si le vamos a un equipo o a otro, o si nos gustan unos o nos gustan otras.
Cuando enaltecemos el valor de todos sin separarnos entre ricos y pobres y nos respetamos por encima de cualquier diferencia. Cuando entendemos que ser está por encima de tener. ¿Quién sale ganando? ¡Todos! ¡Awiwis!