Anoche empezo El Sexo Debil, la nueva teleserie de Argos para Cadena 3. El estreno llego con mucha expectativa ya que desde los promocionales de la teleserie, se notaba una calidad, como es ya de costumbre con Argos.
En este primer capitulo, hubo mucho mucho sexo. Los primeros minutos, simplemente, miramos a Helena (Itati Cantoral) y su novio en un quickie en el aeropuerto. Despues con Julian Camacho (Mauricio Ochmann) tuvo sexo con paciente tras paciente.
Un primer capitulo deberia de ser impactante, deberia de contener escenas fuertes, que tenga algo que te enganche a seguir viendo la novela. Con Argos estamos acostumbrados a que empiezan sus novelas un poco lentas, mientras se van desarrollando los personajes. Si, alcanzamos a ver un poco de la vida de cada uno de los Camacho, vimos como vivian en su vida cotidiana, pero me falto un poco mas de empuje para atraparme. No porque haya muchas escenas de sexo, la vamos a querer seguir viendo, si claro esta, las novelas de Argos nos gustan por su contenido, no por esas escenas.
La novela esta muy bien realizada, muy bien lograda, actuada, dirigida, todo esta perfecto, pero aun creo que en la parte de libreto, les hace falta un poco mas. Entiendo que no es una novela comun, pero igual se necesita de ritmo para mantener cautivo a su publico.
Pero regresando a lo que vimos en pantalla, no me gusto para nada que se enfocara la trama tanto en Itati Cantoral. Yo se que dentro de los creditos, el de ella es el que pesa mas, pero recordemos a Las Aparicio. Ahi se le dio todo el enfoque a las mujeres, no habia ahi un hombre analizandolas, porque con El Sexo Debil si? Segun el enfoque son los hombres, pero es la vision de los hombres, atraves de una mujer, cosa que no me parece justa.
Como que han tratado de meter situaciones un poco comicas y el tono de la novela se pierde. Porque vamos de una escena con textos tan complejos como cuando Dante Camacho estaba con su paciente al borde del suicidio y despues nos vamos a escenas con Helena dejando al novio en el altar diciendo algunas cosillas chistosas. Creo que se tiene que afinar eso un poco. No quiero decir con que la novela tiene que ser densa a mas no poder, porque en la vida hay momentos chistosos, claro esta, pero, el tono ambiental que se maneja no es para que salgan esos parlamentos tan fuera de lugar.
La mejor escena fue cuando el personaje de la actriz Adriana Parra, la esposa de Agustin Camacho, deja al esposo porque se da cuenta de que no es feliz. Como deja a todos los Camacho, sorprendidos, estaba de a 10 esa escena. Me encanto! Ya despues vamos viendo como todas las mujeres de los Camacho los van dejando, hasta la chacha los deja. Es asi como cerro el primer capitulo.
Claro esta, que la seguire viendo, y les sugiero que la sigan porque es una novela que con el tiempo va a ir mejorando.